jueves, 17 de diciembre de 2009

Vale la Pena Reconquistar el Amor Perdido?

Ocurrió en un pueblo pequeño donde nací. Entonces yo tenía 16 años de edad y Emilio, mi amigo tendría unos 21 años. Yo estaba pasando por problemas con mi padre (sólo vivía con él), propios de mi edad y mi amigo había tenido una discusión con su novia, una chica bonita de 19 años llamada Griselda. Nos unimos y haciendo mochilas nos fuimos a la casa rural que mi amigo tenía a 30 Km de la ciudad en donde por tres meses regresamos a la prehistoria y nos volvimos cazadores, pescadores y recolectores. Vivíamos de eso. Yo pensaba en mi papa y mi amigo en Griselda. Él decía que las cosas ya no serían las mismas, decía que ella nunca le perdonaría, decía que nunca mas la recuperaría, decía que la amaba demasiado pero era imposible volver a ella, decía que su vida sin Griselda no tenía ningún sentido. Lloraba y se entregaba al licor. Se apartaba a lugares solitarios o se iba a un pequeño poblado de donde regresaba borracho. Yo, a mis 16 años casi no tenía palabras de consuelo para él… lo que le decía no le ayudaba en nada.
Un día vino y me dijo: “Si no voy a ser feliz junto a ella… pues no seré feliz junto a nadie… quiero que me acompañes al pueblito… te voy a presentar a mi futura esposa”. Bajamos al poblado y me presentó a Zoila, una tranquila señora de 35 años de edad, al principio pensé que ella sería la suegra de Emilio, pero me equivoque, era la novia. Ahí ultimaron los detalles para el matrimonio. De regreso, Emilio me dijo: “Se lo que estás pensando, que ella es muy vieja para mí, que voy a arruinar mi vida… pero ya te dije… estar sin Griselda es tener toda la vida arruinada… entonces que mas da con quien me caso”. Yo le dije:”pero vámonos de acá, regresemos a nuestra casa y busca a Griselda y plantéale recomenzar”. “No, eso es casi imposible… ella ya no me quiere… ella no me perdonará nunca lo que pasó… quisiera decirle tantas cosas… pero no puedo hacerlo…”.
Yo sólo regresé a la ciudad y lo primero que hice después de ver a mi padre fue buscar a Griselda. Ella estaba destrozada, no sabía nada de Emilio, quería verlo, abrazarlo, pero no sabía cómo encontrarlo. Le dije en donde estaba, también le dije cómo se encontraba Emilio, tan destrozado como ella. Ella lloró.

Ese día cuando regresé a casa mi padre me tenía una sorpresa. Nos mudamos de ciudad y algún tiempo después me enteré que Emilio se casó con la señora Zoila y vivían en ese villorrio. 15 años después, por pura casualidad, me encontré en la capital de Perú con Zoila, entonces ya era una señora de 50 años. Me contó que estos 15 años junto e Emilio había sido de puro martirio. Que él tomaba mucho y en cada borrachera salía a gritos el nombre de Griselda, me dijo también que en tres ocasiones Emilio se fue de la casa y cada vez regresaba de rodillas pidiendo perdón. También me dijo que ella se enteró que en esas ocasiones, Emilio se fue a buscar a Griselda y que ella le dijo con claridad que regresar ya rea imposible por la responsabilidad familiar que Emilio había contraído con Zoila (tenía 3 niños). También supe que Griselda nunca se caso.

Han pasado 35 años. Antes de ayer conocí a un hombre del pueblito aquel en donde Emilio vive con Zoila. Los conoce muy bien. También conoce los pormenores de esta situación. Zoila ahora es una anciana de 70 años y Emilio un caballero de 55 años de edad. Toma sus tragos con cierta frecuencia… y habla de Griselda. Habla de la tragedia de amor que tuvo que vivir, por no saber reconquistar el amor perdido. Griselda sigue soltera, quizás aun lo esta esperando.

Esta historia es real… cada vez que pienso en estas personas tengo mucha pena y sufro junto a ellos. En realidad es una tragedia. Pudo evitarse? De que manera? Es un caso aislado? O es un caso que se da con mucha frecuencia? Es justo entregarse a la infelicidad solo porque no hay valor o métodos para una reconquista?.

Estimado amigo o amiga, en estos momentos hay muchos Emilios y muchas Griseldas y muchas Zolias en todas partes del mundo, pasando por esta tragedia. Y este blogg sirve para ayudarlos, para darles una mano en una situación que a muchos puede arrancar una sonrisa, pero a los que lo viven, les trae desdicha, dolor, infelicidad. Espero tu comentario y que compartas este blogg con tus amigos y conocidos y si por ahí conoces a un Emilio o una Griselda o una Zoila, mándale este blogg que será de mucha ayuda para ellos.

Aqui Una Ayuda... vale la pena?... es posible.